miércoles, 5 de marzo de 2014

EDURNE



 Edurne - Historia de unos Cuernos



   Me había invitado mi amigo pintor Biderbost a una de sus exposiciones en el Pub Piropos de la zona de Indautxu de Bilbao. Llegue sobre las  ocho treinta, el evento ya había comenzado. Allí estaban viejos  conocidos como Txomin, Guasinton y otros. Me acerqué a Biderbost para saludarle y me ofreció un vaso de vino que me lo sirvió el difunto Gus que siempre le contrataban para maestro de ceremonias, unos años mas tarde moriría de Cáncer. Había otros pintores como Rosquillas con su sombrero negro y sus melenas blancas  y uno de los hermanos Roscubas, otros me eran conocidos pero no les conocía por el nombre. Había muchas mujeres también mucha y gente de la farándula. Me puse a mirar los cuadros de la exposición y realmente era difícil entender los cuadros raros de Biderbost m esos colores  oscuros que parecen pinturas prehistóricas.



  Note que había alguien a mi lado mirando los cuadros, mire de reojo y era una mujer vestida de negro con una pamela en la cabeza y de una gran belleza, tenía unos ojos azules muy grandes y el pelo era rubio con bucles, un cuerpo casi perfecto y se notaba que era de mucha clase por la ropa y el estilismo que llevaba. Posiblemente de Ángela Arregui, Vuiton y demás modistas/os de marca famosa.



    Me pregunto si me gustaba la exposición y asentí diciéndola que a Biderbost no le entiendo muy bien pero que me parecían bastante buenos los cuadros. Ella me dijo que iba a comprarle dos cuadros y  a  ver cuál me parecía a mi los mas bellos, la conteste que eso es a gusto de cada cuál, que en esto del arte cada uno tiene un sentimiento distinto delante de una obra y depende lo que te inspire el cuadro es cuando tu dices que este es el mas bello o más bonito. Me miro fijamente y me pregunto si entendía mucho de arte y la conteste que mucho no, pero que algunas nociones generales tenía por haber estado con artistas de todo tipo. Me sonrío y me pregunto a ver a qué me dedicaba mirándome fijamente con sus ojos directamente a los míos  y sonriendo. La conteste que a la vida Bohemia y la entro una carcajada. No creo que solo eso sea a lo que te dediques me dijo por la pinta pareces músico, escritor o poeta hizo un guiño y sonrío de nuevo. La dije que tenía un grupo de Blues llamado Bilboblus y que hacía Bolos por los bares, salas y demás garitos. Me pregunto si habia grabado algo y la conteste que no y que no creía que con esta banda lo hiciéramos algún día pues no veía muchas posibilidades y estábamos a punto de separarnos.



    Se quedo pensando un rato y mirando a otro cuadro y me dijo que le gustaba ese, ami también la conteste y en una libreta apunto el número, el nombre y el precio y en ese instante me dijo que se llamaba Edurne, yo también me presente y me dio un beso en la mejilla luego se marcho a otro lugar del bar y la seguí con la mirada, era una mujer muy hermosa. En ese momento sonó la voz de Gus que nos llamaba para el Lunch. Me acerque despacio a la barra del bar y de una bandeja cogi un pintos de jamón y le pedí otro vino a Gus. Me quede mirando a la gente y en ese momento se cruzó ella por delante mirándome y sonriendome, yo la salude con la cabeza y seguí cogiendo pintxos y escuchando el murmullo de las conversaciones y la música de Herbie Hancok que sonaba en el local.



    Fui a despedirme de Biderbost y después de los viejos amigos y de Guasinton, deje el vaso en la mesa y me despedí de Gus y camine hacia la puerta al salir me encontré a Edurne junto a la puerta fumando y me pregunto si ya me iba, la conteste que si y me pregunto a ver donde voy, al Garearri que es un bar que esta casi enfrente del Piropos a ver a Javi y a Eduardo que son los dueños y a tomar un Cubata. Ella tiró el cigarro y me dijo que esperase, que venía conmigo también a tomar algo. Entro dentro del local y tardo como unos cinco minutos en salir ¡Ya esta! Exclamo, había ido a decirle a Biderbost los cuadros que quería comprarle y a recoger su abrigo y arreglarse un poco. Nos dirigimos al Garearri y pedimos un cubata y un Gintonic. Había buen ambiente, estaban los golfos y golfas  de siempre, que el bar era como un club privado siempre en el extremo izquierdo y el resto de gente pija que se colocan en el lado derecho. Ese día por suerte no había Futbol y había buena música por que pinchaba Txarly.



   Edurne me empezó a contar lo que hacía, trabajaba en la EITB-Radio Euskadi en un programa de Literatura y también haciendo producción en otros programas, yo también empecé a contar mi vida bohemia por el Casco Viejo y la zona de Indautxu y después derivamos en otros asuntos relacionados con la música, el arte, filosofía, libros y cosas por el estilo. Nos dieron las 12 de la noche y la pregunte a ver que iba a hacer ahora y me contesto que la sugiriese un sítio para ir a tomar otra copa. La conteste si por la misma zona u otra, por donde quieras me dijo y sonrió. Comente que pena de no tener coche si no la llevaría a la Karola en el barrio de Olabeaga. Me comento que no la importaba ir en taxi, fuimos a la parada de la plaza de Indautxu allí cerca y cogimos uno.

















  Llegamos a la Karola y nos sentamos en la terraza debajo de los árboles, se respiraba un ambiente de paz y tranquilidad, debe de ser por el río Nervion que esta enfrente. Se escuchaba Jazz,  era la música de Miles Davis. Estuvimos un buen rato en silencio, ella suspiro y me miro, me agarro del brazo. Comento lo bien que se estaba allí y que el sitio era romántico y bohemio. Había mucha gente con pinta bohemia y algunos pijos que gritaban alto dentro del bar. Nos dieron las dos de la madrugada charlando y me comento para irnos al centro de Bilbao, fui a llamar para un taxi y me dijo que la apetecía ir andando y de esa manera gastar el alcohol que habíamos bebido y así lo hicimos. Pasamos por el muelle Euskalduna donde hay unos barcos en dique seco en el Canal y comentamos del cambio de Bilbao y ahora, de los obreros de Euskalduna y de cómo era Bilbao antes. Había luna llena y se reflejaba en la ría, ella se asomo a la barandilla y exclamo l bonito que era aquel instante. Nos quedamos mirando el agua y se incorporo un momento y me agarro por el cuello, me atrajo sobre ella y me beso apretando su cuerpo sobre  mi. No podía creerlo ¡aquella hermosa mujer me estaba besando! Nos miramos a los ojos y seguimos caminando esta vez agarrados de la mano. Llegamos a Indautxu y dijo para irnos a su casa, vivía en las torres de Indautxu, subimos a su casa y me sentó en su salón, fue preparar algo para beber y conecto el equipo de sonido, sonaba BB. King. La casa era grande y se notaba que tenía clase, había algunos cuadros colgados y algunas esculturas encima de un mueble. La decoración era algo minimalista, apareció por la puerta con dos vasos y se había cambiado la ropa, llevaba un camisón negro transparente y vi su belleza interior, tenía el cuerpo de una Ninfa, su belleza era enorme, radiante, sensual y sensible al tacto. Comenzamos a besarnos y ella me fue desnudando sobre el sofá, nos caímos al suelo, aquella mujer era todo fuego y sensualidad, follamos varias veces sobre la mullida alfombra.



     Nos quedamos tumbados medio dormidos, sonaba Trill is Gonne de BB. King. Mire el reloj y eran las seis de la madrugada, la dije que me iba t que no dormiría allí, me vestí y me dirigía hacia la puerta pero ella también se levanto, me acompaño a la puerta desnuda, me siguió besando y me pidió mi número de teléfono prometiendo llamarme. Llegue a mi casa, me tumbe en la cama y aun me parecía increíble  lo de esa noche, luego me quede dormido.



     Pasó algún tiempo y no me llamaba, yo estaba un poco extrañado pero al de dos semanas supe que ya no me llamaría, me quite de la cabeza aquella mujer y me dedique a lo mío, ensayar con la Bilboblus y hacer unos Bolos por Bilbao y la zona de Barrika en los bares; Sunset, El Golfo Norte y  otros. Ir al Casco Viejo a emborracharme y fumar algún porro de vez en cuando con algún colega



    Pasaron unos meses y me fui una noche de jueves al Pub Camil a formalizar un bolo con el dueño para la semana siguiente, me coloqué en una esquina de la barra cerca de la puerta y hacia el medio vi una melena rubia con muchos bucle de espaldas, me quedé un poco dubitativo y con cara de interrogación y al final la reconocí. Estaba con otro hombre que la agarraba y ella le miraba con cara de embelesada. Me sonrei a mí mismo y dije algo sobre las mujeres que no recuerdo y una chica que estaba a mi lado me miro con cara de interrogación y luego se hecho a reír. Al de un  rato escuche mi nombre y vi que era ella haciéndome señales para que me acercase. Me quede un poco sorprendido y me acerque lentamente con mi vaso de Cubata n la mano. Ella me sonrío, medió un beso en la mejilla y me presento al hombre diciendo

- Te presento a Pablo mi marido, y dirigiéndose a él comento que me conoció en la exposición de Biderbost, y que yo era un gran artista de blues. Era algo más alto que yo y con pelito largo con melenilla peinado ralla en medio a lo pijo y vestía un traje seguramente de Adolfo Domínguez., No sabía donde esconderme pero el hombre me empezó a preguntar como se llamaba mi banda, si hacia muchos bolos y a ver cuando era el próximo para ir a verme, me dijo que si no tenía que hacer un viaje ese día que no iba a faltar. Me dijo que era pilota de aviación y que muchas veces no podía ver conciertos que le interesaban. Le gustaba el Blues y el Jazz, hablamos de algunos músicos de Bilbao que él conocía. Yo había terminado mi vaso y les dije que me marchaba, él quiso invitarme a otro pero le agradecí el detalle y le dije que me era imposible, me despedí de ellos dándole la mano al hombre  y ella me dio un beso en la mejilla dejándome la cara pintada de rojo. Salí hacia la puerta conteniendo la estupefacción, cuando estaba en la calle me entro la risa ¡Era increíble, había dado la mano a un Cornudo!

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