Edurne - Historia de unos Cuernos
Me había
invitado mi amigo pintor Biderbost a una de sus exposiciones en el Pub Piropos
de la zona de Indautxu de Bilbao. Llegue sobre las ocho treinta, el evento ya había comenzado. Allí
estaban viejos conocidos como Txomin,
Guasinton y otros. Me acerqué a Biderbost para saludarle y me ofreció un vaso
de vino que me lo sirvió el difunto Gus que siempre le contrataban para maestro
de ceremonias, unos años mas tarde moriría de Cáncer. Había otros pintores como
Rosquillas con su sombrero negro y sus melenas blancas y uno de los hermanos Roscubas, otros me eran
conocidos pero no les conocía por el nombre. Había muchas mujeres también mucha
y gente de la farándula. Me puse a mirar los cuadros de la exposición y realmente
era difícil entender los cuadros raros de Biderbost m esos colores oscuros que parecen pinturas prehistóricas.
Note que había
alguien a mi lado mirando los cuadros, mire de reojo y era una mujer vestida de
negro con una pamela en la cabeza y de una gran belleza, tenía unos ojos azules
muy grandes y el pelo era rubio con bucles, un cuerpo casi perfecto y se notaba
que era de mucha clase por la ropa y el estilismo que llevaba. Posiblemente de Ángela
Arregui, Vuiton y demás modistas/os de marca famosa.
Me pregunto
si me gustaba la exposición y asentí diciéndola que a Biderbost no le entiendo
muy bien pero que me parecían bastante buenos los cuadros. Ella me dijo que iba
a comprarle dos cuadros y a ver cuál me parecía a mi los mas bellos, la
conteste que eso es a gusto de cada cuál, que en esto del arte cada uno tiene
un sentimiento distinto delante de una obra y depende lo que te inspire el
cuadro es cuando tu dices que este es el mas bello o más bonito. Me miro fijamente
y me pregunto si entendía mucho de arte y la conteste que mucho no, pero que
algunas nociones generales tenía por haber estado con artistas de todo tipo. Me
sonrío y me pregunto a ver a qué me dedicaba mirándome fijamente con sus ojos
directamente a los míos y sonriendo. La
conteste que a la vida Bohemia y la entro una carcajada. No creo que solo eso
sea a lo que te dediques me dijo por la pinta pareces músico, escritor o poeta
hizo un guiño y sonrío de nuevo. La dije que tenía un grupo de Blues llamado
Bilboblus y que hacía Bolos por los bares, salas y demás garitos. Me pregunto
si habia grabado algo y la conteste que no y que no creía que con esta banda lo
hiciéramos algún día pues no veía muchas posibilidades y estábamos a punto de
separarnos.
Se quedo
pensando un rato y mirando a otro cuadro y me dijo que le gustaba ese, ami
también la conteste y en una libreta apunto el número, el nombre y el precio y
en ese instante me dijo que se llamaba Edurne, yo también me presente y me dio un
beso en la mejilla luego se marcho a otro lugar del bar y la seguí con la
mirada, era una mujer muy hermosa. En ese momento sonó la voz de Gus que nos
llamaba para el Lunch. Me acerque despacio a la barra del bar y de una bandeja
cogi un pintos de jamón y le pedí otro vino a Gus. Me quede mirando a la gente
y en ese momento se cruzó ella por delante mirándome y sonriendome, yo la
salude con la cabeza y seguí cogiendo pintxos y escuchando el murmullo de las
conversaciones y la música de Herbie Hancok que sonaba en el local.
Fui a
despedirme de Biderbost y después de los viejos amigos y de Guasinton, deje el
vaso en la mesa y me despedí de Gus y camine hacia la puerta al salir me
encontré a Edurne junto a la puerta fumando y me pregunto si ya me iba, la
conteste que si y me pregunto a ver donde voy, al Garearri que es un bar que
esta casi enfrente del Piropos a ver a Javi y a Eduardo que son los dueños y a
tomar un Cubata. Ella tiró el cigarro y me dijo que esperase, que venía conmigo
también a tomar algo. Entro dentro del local y tardo como unos cinco minutos en
salir ¡Ya esta! Exclamo, había ido a decirle a Biderbost los cuadros que quería
comprarle y a recoger su abrigo y arreglarse un poco. Nos dirigimos al Garearri
y pedimos un cubata y un Gintonic. Había buen ambiente, estaban los golfos y
golfas de siempre, que el bar era como
un club privado siempre en el extremo izquierdo y el resto de gente pija que se
colocan en el lado derecho. Ese día por suerte no había Futbol y había buena música
por que pinchaba Txarly.
Edurne me empezó
a contar lo que hacía, trabajaba en la EITB-Radio Euskadi
en un programa de Literatura y también haciendo producción en otros programas,
yo también empecé a contar mi vida bohemia por el Casco Viejo y la zona de
Indautxu y después derivamos en otros asuntos relacionados con la música, el
arte, filosofía, libros y cosas por el estilo. Nos dieron las 12 de la noche y
la pregunte a ver que iba a hacer ahora y me contesto que la sugiriese un sítio
para ir a tomar otra copa. La conteste si por la misma zona u otra, por donde
quieras me dijo y sonrió. Comente que pena de no tener coche si no la llevaría
a la Karola en
el barrio de Olabeaga. Me comento que no la importaba ir en taxi, fuimos a la
parada de la plaza de Indautxu allí cerca y cogimos uno.
Llegamos a la Karola y nos sentamos en la
terraza debajo de los árboles, se respiraba un ambiente de paz y
tranquilidad, debe de ser por el río Nervion que esta enfrente. Se escuchaba
Jazz, era la música de Miles Davis. Estuvimos
un buen rato en silencio, ella suspiro y me miro, me agarro del brazo. Comento
lo bien que se estaba allí y que el sitio era romántico y bohemio. Había mucha
gente con pinta bohemia y algunos pijos que gritaban alto dentro del bar. Nos
dieron las dos de la madrugada charlando y me comento para irnos al centro de
Bilbao, fui a llamar para un taxi y me dijo que la apetecía ir andando y de esa
manera gastar el alcohol que habíamos bebido y así lo hicimos. Pasamos por el
muelle Euskalduna donde hay unos barcos en dique seco en el Canal y comentamos
del cambio de Bilbao y ahora, de los obreros de Euskalduna y de cómo era Bilbao
antes. Había luna llena y se reflejaba en la ría, ella se asomo a la barandilla
y exclamo l bonito que era aquel instante. Nos quedamos mirando el agua y se
incorporo un momento y me agarro por el cuello, me atrajo sobre ella y me beso
apretando su cuerpo sobre mi. No podía
creerlo ¡aquella hermosa mujer me estaba besando! Nos miramos a los ojos y
seguimos caminando esta vez agarrados de la mano. Llegamos a Indautxu y dijo
para irnos a su casa, vivía en las torres de Indautxu, subimos a su casa y me sentó
en su salón, fue preparar algo para beber y conecto el equipo de sonido, sonaba
BB. King. La casa era grande y se notaba que tenía clase, había algunos cuadros
colgados y algunas esculturas encima de un mueble. La decoración era algo
minimalista, apareció por la puerta con dos vasos y se había cambiado la ropa,
llevaba un camisón negro transparente y vi su belleza interior, tenía el cuerpo
de una Ninfa, su belleza era enorme, radiante, sensual y sensible al tacto. Comenzamos
a besarnos y ella me fue desnudando sobre el sofá, nos caímos al suelo, aquella
mujer era todo fuego y sensualidad, follamos varias veces sobre la mullida
alfombra.
Nos
quedamos tumbados medio dormidos, sonaba Trill is Gonne de BB. King. Mire el
reloj y eran las seis de la madrugada, la dije que me iba t que no dormiría allí,
me vestí y me dirigía hacia la puerta pero ella también se levanto, me acompaño
a la puerta desnuda, me siguió besando y me pidió mi número de teléfono
prometiendo llamarme. Llegue a mi casa, me tumbe en la cama y aun me parecía increíble lo de esa noche, luego me quede dormido.
Pasó algún
tiempo y no me llamaba, yo estaba un poco extrañado pero al de dos semanas supe
que ya no me llamaría, me quite de la cabeza aquella mujer y me dedique a lo mío,
ensayar con la Bilboblus
y hacer unos Bolos por Bilbao y la zona de Barrika en los bares; Sunset, El
Golfo Norte y otros. Ir al Casco Viejo a
emborracharme y fumar algún porro de vez en cuando con algún colega
Pasaron unos
meses y me fui una noche de jueves al Pub Camil a formalizar un bolo con el
dueño para la semana siguiente, me coloqué en una esquina de la barra cerca de
la puerta y hacia el medio vi una melena rubia con muchos bucle de espaldas, me
quedé un poco dubitativo y con cara de interrogación y al final la reconocí. Estaba
con otro hombre que la agarraba y ella le miraba con cara de embelesada. Me
sonrei a mí mismo y dije algo sobre las mujeres que no recuerdo y una chica que
estaba a mi lado me miro con cara de interrogación y luego se hecho a reír. Al
de un rato escuche mi nombre y vi que
era ella haciéndome señales para que me acercase. Me quede un poco sorprendido
y me acerque lentamente con mi vaso de Cubata n la mano. Ella me sonrío, medió
un beso en la mejilla y me presento al hombre diciendo
- Te presento a Pablo mi marido, y dirigiéndose a él
comento que me conoció en la exposición de Biderbost, y que yo era un gran
artista de blues. Era algo más alto que yo y con pelito largo con melenilla peinado
ralla en medio a lo pijo y vestía un traje seguramente de Adolfo Domínguez., No
sabía donde esconderme pero el hombre me empezó a preguntar como se llamaba mi
banda, si hacia muchos bolos y a ver cuando era el próximo para ir a verme, me
dijo que si no tenía que hacer un viaje ese día que no iba a faltar. Me dijo
que era pilota de aviación y que muchas veces no podía ver conciertos que le
interesaban. Le gustaba el Blues y el Jazz, hablamos de algunos músicos de
Bilbao que él conocía. Yo había terminado mi vaso y les dije que me marchaba, él
quiso invitarme a otro pero le agradecí el detalle y le dije que me era
imposible, me despedí de ellos dándole la mano al hombre y ella me dio un beso en la mejilla dejándome
la cara pintada de rojo. Salí hacia la puerta conteniendo la estupefacción,
cuando estaba en la calle me entro la risa ¡Era increíble, había dado la mano a
un Cornudo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario